La vitivinícola Casa Madero ha denunciado el desvío de cuatro millones de metros cúbicos de agua, la cual, afirman, está siendo alquilada por ejidatarios a una empresa agrícola. Este conflicto ha generado tensiones significativas entre Casa Madero y los ejidatarios.
Brandon Milmo, co-director general de Casa Madero, presentó un video de hace tres años que evidencia cómo una parte del agua que utilizan se desvía a un campo de cultivo que, según él, no pertenece a los ejidatarios, sino a una empresa cuyo propietario también cultiva viñedos.
El conflicto por el agua se ha prolongado por siete años y se ha intensificado recientemente. El 29 de enero, ejidatarios intentaron acceder a la propiedad de Casa Madero debido a la falta de agua, y fueron recibidos con resistencia armada. Posteriormente, el 9 de febrero, Casa Madero reportó incendios en terrenos de su propiedad.
Milmo también hizo un llamado al gobernador para recibir apoyo en la resolución de esta situación, advirtiendo que los problemas legales asociados son prolongados. “Los temas legales tardan años… es un secreto a voces que los ejidatarios invaden los compartidores para rentar el agua”, declaró Milmo, quien ha expresado recibir amenazas.
Durante un recorrido por Casa Madero, se observó un flujo escaso de agua en la acequia. Milmo presentó un video de 4 minutos y medio, grabado con un dron, que muestra la desviación del agua de la acequia hacia una parcela que no corresponde a un ejido. “Fue cuando volamos el dron y eso que vieron no es un ejido”, comentó Milmo, manteniendo en reserva el nombre de la empresa involucrada por razones de seguridad.
Una revisión de la zona sugiere que podría tratarse de la empresa Parras Valley, establecida en 2023. Hasta el momento, los intentos de contactar a la empresa a través de su línea telefónica han sido infructuosos.
La propuesta de Casa Madero incluye establecer un diálogo entre los ejidatarios y el gobierno estatal, señalando que la situación ha superado la capacidad de respuesta del municipio.