Este martes, Stellantis informó a sus trabajadores en Estados Unidos sobre su intención de reducir la plantilla y ofrecer un programa de bajas incentivadas a empleados no sindicalizados.
El fabricante reportó una caída del 48% en sus beneficios semestrales, que alcanzaron los 5 mil 647 millones de euros (6 mil 108 millones de dólares), y advirtió que, si no logra suficientes bajas voluntarias, procederá con despidos.
La compañía, que comunicó sus planes a través de un correo a sus empleados, no detalló la magnitud de la reducción de empleos que busca implementar.
En Norteamérica, Stellantis produce vehículos de las marcas Jeep, Ram, Chrysler y Dodge, además de ofrecer automóviles de Fiat y Alfa Romeo.
En su informe semestral, Stellantis destacó un notable descenso en ventas e ingresos en Norteamérica, donde comercializó 838 mil vehículos, lo que representa una disminución del 16.5% en su volumen de negocio, cayendo a 38 mil 353 millones de euros.
La comunicación de hoy está alineada con el plan Dare Forward 2030, iniciado por Stellantis tras la fusión de PSA y Fiat Chrysler en 2021, con el objetivo de duplicar los ingresos a 300 mil millones de euros para 2030 y aumentar los beneficios.
Desde diciembre de 2019 hasta finales de 2023, la compañía ha eliminado 47 mil 500 puestos de trabajo, aproximadamente un 15% de su plantilla.
En su comunicado, Stellantis indicó que responde a las “presiones inflacionarias” y busca ofrecer a los consumidores “vehículos asequibles de la más alta calidad,” subrayando la necesidad de reducir costos “para garantizar la sustentabilidad a largo plazo de la empresa.”
