El cuerpo de Marcelina Quintero Acuña, de 29 años, fue hallado en estado avanzado de descomposición en una vivienda del fraccionamiento La Paz, en Torreón. Este trágico suceso ha encendido la indignación de la comunidad, intensificando el pedido de justicia y la necesidad de acciones efectivas contra la violencia de género en Coahuila.
Las autoridades aún investigan las circunstancias que rodean su muerte; sin embargo, los colectivos feministas han levantado la voz, exigiendo justicia y respuestas contundentes por parte de las instituciones responsables.
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Marcelina, quien cohabitaba con su pareja, fue encontrada sola en la vivienda, ya que su compañero no estaba presente al momento de la llegada de las autoridades. Este suceso se suma a la creciente cifra de mujeres asesinadas en Coahuila, alcanzando un total de 15 en lo que va del año, según datos preliminares.
Ante esta alarmante situación, Polett Delgado, activista feminista, destacó la urgencia de las colectivas que luchan contra la violencia de género en la región.
“No deseamos que las víctimas se conviertan en números. Queremos recordar a Yajaira, a Marcelina y a todas las mujeres que han sido asesinadas. Es crucial humanizar estas tragedias y no normalizar la violencia que enfrentamos en Coahuila,” enfatizó.
El aumento de casos de feminicidio ha generado un fuerte clamor por parte de la población para que se inste a las autoridades a activar la alerta de género en el estado.
Mónica Guerrero, activista que aboga por el reconocimiento de la violencia vicaria y psicológica en Coahuila, lanzó un llamado urgente: “Los protocolos actuales son insuficientes. Necesitamos medidas más severas para reducir los feminicidios. No queremos más mujeres muertas. La situación en la Laguna es alarmante, y es imperativo que las autoridades actúen de manera inmediata y eficaz.”
El caso de Marcelina representa solo una parte del problema. De las 15 mujeres asesinadas en el estado este año, 14 fueron víctimas de sus parejas o exparejas.
Este patrón de violencia muchas veces comienza con abuso psicológico en el noviazgo y tiende a intensificarse. Sin embargo, como señala Mónica Guerrero, “cuando una mujer acude al Ministerio Público a denunciar violencia psicológica, en muchas ocasiones no se le toma en serio. Es un desafío constante lograr que se reconozca y atienda este tipo de violencia antes de que sea tarde.”
A raíz de esta realidad, las colectivas de mujeres en Coahuila están trabajando incansablemente para ofrecer apoyo a las víctimas y sus familias. Polett Delgado instó a todas las mujeres a buscar ayuda, sin importar su edad o situación social, para que no se sientan solas en su lucha.
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“El feminismo no es solo para un grupo de mujeres, es para todas. En Saltillo, Torreón, Piedras Negras y en todo el estado hay organizaciones que brindan apoyo gratuito a quienes lo necesiten. Estamos aquí para ayudar y asegurar que nadie se sienta sola; juntas podemos enfrentar esta dolorosa situación.
