En 2022, México atrajo una inversión extranjera directa (IED) de 30,196 millones de dólares, lo que representa una caída del 22.8% en comparación con el récord de 39,108 millones de dólares alcanzado en 2021, según un reciente informe.
Esta reducción en la IED se atribuye principalmente a una disminución del 72% en las aportaciones de capital, alcanzando su nivel más bajo desde 2012. Este segmento de inversión representó únicamente el 17% del total ingresado al país.
Por otro lado, los préstamos entre empresas también sufrieron una caída significativa, cercana al 130%, lo que resultó en salidas de capital en algunas ocasiones.
El sector servicios reportó una disminución del 29% en la IED anual, impulsada por desinversiones en las áreas de telecomunicaciones e informática.
Un informe relacionado señala que en 2022 se produjeron flujos extraordinarios de inversión por eventos como la fusión de Televisa y Univisión, así como la reestructuración de Aeroméxico.
Se destaca que el 46% de la IED recibida en México provino de Estados Unidos, subrayando la importancia de este socio comercial.
A nivel regional, América Latina y el Caribe sumaron 184,304 millones de dólares en IED, lo que representa una baja del 9.9% anual, influenciada por la disminución de flujos en México y Brasil.
Los expertos señalan que esta caída en la IED debe ser entendida dentro de un contexto global donde las altas tasas de interés y los conflictos geopolíticos continúan afectando las decisiones de inversión.