En una intensa sesión llevada a cabo el martes y continuando hasta la madrugada del miércoles, la comisión de Puntos Constitucionales del Congreso de Querétaro desestimó la Reforma al Poder Judicial.
Es relevante mencionar que la propuesta impulsada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador había recibido la aprobación previa de la Cámara de Diputados federal y del Senado de la República, donde legisladores de Morena y sus aliados, Partido del Trabajo (PT) y Partido Verde Ecologista de México (PVEM), lograron la mayoría.
A partir de la madrugada del miércoles, la iniciativa fue objeto de debate en las legislaturas estatales; Oaxaca fue el primero en aprobar la Reforma Judicial tan solo unas horas después de la ratificación en el Senado.
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Sin embargo, Querétaro se convirtió en el primer estado en rechazar la propuesta del Presidente López Obrador sobre el Poder Judicial de la Federación (PFJ).
Además, no se anticipa que la iniciativa se presente en el Pleno para su difusión y queda oficialmente desechada.
En esta sesión, la congresista Ana Paola López, presidenta de la Mesa Directiva, votó en contra del proyecto y expresó su descontento por la aprobación en el Senado de la República, calificándolo como ‘un retroceso’ para el país.
“Mi voto es en contra porque rechazo completamente que no se genere un sistema de contrapesos y que no se permita un Poder Judicial sólido, transparente y capaz de defender la pluralidad. Esto es un día lamentable”, afirmó la diputada del Partido Acción Nacional.
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El Congreso de Querétaro está compuesto por 25 diputados: 14 del Partido Acción Nacional (PAN), 5 de Morena, 3 del Partido Revolucionario Institucional (PRI), 2 de Querétaro Independiente y 1 del PVEM.
Es importante señalar que para que la Reforma Judicial obtenga aprobación total, al menos 17 congresos estatales de los 32 existentes deben respaldarla. Si se alcanza la mayoría, la reforma al Poder Judicial podrá ser formalizada por el Poder Ejecutivo, es decir, el Presidente.